FUENTE . LA VANGUARDIA
El Plan Hidrológico del Ebro, cuyo objetivo es recuperar los ecosistemas de este río antes del 2015, deberá esperar. El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) Rafael Romeo, afirmó en Barcelona que este organismo no sacará a información pública este documento antes de que finalice la legislatura.
Los desacuerdos entre las administraciones y los usuarios del agua explican la decisión del Gobierno de frenar su tramitación. La Vanguardia supo además que la cercanía de las elecciones –cuando este asunto podría levantar una gran polémica- han influido en esta postura.
Un escollo fundamental ha sido la diferencia de criterios entre la Confederación y la Generalitat sobre el volumen de agua que debería reservarse (como caudal ecológico de mantenimiento) en la desembocadura del Ebro.
La directiva marco europea sobre aguas exige a las administraciones que apliquen planes de cuenca para recuperar los ecosistemas de los ríos antes del 2015. Pero, visto el desacuerdo, este objetivo en el caso de la cuenca del Ebro se demora.
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), Rafael Romeo, indicó que "el plan hidrológico del Ebro no va a salir en esta legislatura" y que, desde su punto de vista, incluso, "es preferible que sea así", vistos los desacuerdos existentes. La idea es que el documento salga a la luz tras las elecciones generales.
Sus declaraciones se produjeron en las II Jornadas de Ingeniería del Agua, organizada el Institut Flumen, l'Agència Catalana de l'Aigua y la Confederación Hidrográfica del Ebro, y que reúnen en Barcelona en la UPC a más de 200 expertos. Romeo destacó el trabajo que han hecho los técnicos de la Confederación Hidrográfica y precisó que falta por resolver las diferencias de criterio sobre el caudal ecológico mínimo de mantenimiento que se debería reservar en tres tramos del Ebro (en Zaragoza, en la confluencia del Segre en Lleida y en el Delta del Ebro).
"Nos faltan sólo rellenar esas tres casillas", dijo gráficamente. La Generalitat ha reclamado que se incremente esos caudales en el Delta. Romeo también dijo que en la Confederación del Ebro cunde el "desánimo" tras la reforma legislativa aprobada el pasado mes de agosto por el Gobierno según el cual las competencias de policía de agua (vigilancia e inspección de vertidos) que ejerce la confederaciones podrán ser asumidas por las comunidades autónomas que tengan transferidas esta competencia en sus estatutos.
De esta manera, tareas que asumían las confederaciones podrán ser llevadas a cabo por las autonomías de Andalucía, Aragón o Catalunya. Asumiendo el sentimiento de los técnicos, Romeo precisó que este traspaso de competencias a las autonomías rompe el concepto de unidad de cuenca, básico para poder llevar a cabo una correcta gestión del agua, pues facilita todos los operativos de coordinación en situaciones de sequía, por ejemplo. También la directivas comunitarias plantean la idea de mantener la unidad de cuenca.
Con el plan hidrológico del Ebro se plantea lograr que en el 2015 se logre que "el 80% de las masas de agua" de esta cuenca estén en buen estado, mientras que ahora este examen sólo los aprueban el 60% de esas masas de agua. El plan también debe dar respuesta a las demandas presentes y futuras, agregó Romeo.
La CHE tiene además entre sus planes de acción en la cuenca del Ebro iniciativas para eliminar los obstáculos que complican el movimiento de los peces a lo largo del río (se construirán escalas para peces); y se van a incrementar los controles del agua y de vertidos, y se procederá a la extracción de los contaminantes acumulados en el meandro de Flix.
No hay comentarios:
Publicar un comentario