FUENTE: ABC/EFE
El grupo ecologista Greenpeace instó hoy al Gobierno alemán a eliminar las subvenciones a empresas que dañan el medio ambiente para financiar el "apagón nuclear" y promover la extensión de las energías renovables.
De aplicar las medidas que propuso la ONG en una rueda de prensa, el Ejecutivo federal podría recuperar anualmente unos 5.400 millones de euros, muy por encima de los 3.000 millones de euros anuales que ha calculado que costará el salto energético.
"Eliminar las subvenciones que dañan el medio ambiente es matar dos pájaros de un tiro. Se financiará el cambio energético sin que el Estado se endeude o eleve impuestos generales, y se protegerá mejor el clima", explicó Stefan Krug, responsable de la sección política de Greenpeace en Berlín.
Greenpeace urgió a la coalición de centroderecha que encabeza Angela Merkel a aprovechar el "apagón nuclear" no solo como "desafío tecnológico" sino también como oportunidad para instaurar una "política financiera de orientación ecológica".
Entre las medidas que apuntan los ecologistas, basándose en un informe de la ONG alemana Foro de Economía Ecosocial (FÖS), se encuentran la eliminación de las excepciones al impuesto ecológico, que reportaría 2.000 millones de euros al año, y de los privilegios para los vehículos de empresa, que aportaría 1.600 millones de euros anuales a las arcas públicas.
Además, Greenpeace aboga por igualar el impuesto del diesel con el de la gasolina, lo que supondría 1.000 millones de euros más al año; elevar el impuesto al combustible nuclear, que implicaría 900 millones de euros más; y subir el impuesto al tráfico aéreo, especialmente a los pasajeros de primera clase, para obtener 500 millones de euros más.
El estudio del FÖS afirma que a corto plazo se recuperarían anualmente unos 5.400 millones de euros al año destinados hasta ahora a subvenciones, pero que a largo plazo podrían llegar a lograrse 15.200 millones de euros.
El ahorro total de esas cinco medidas asciende a 6.000 millones de euros, de los que por motivos estadísticos, previendo que el consumo pueda retraerse ligeramente, el FÖS descuenta un 10 %, por lo que la cifra final es de 5.400 millones de euros.
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