FUENTE: TELEPRENSA. PRIMER PERIÓDICO DIGITAL DE ALMERÍA
Sin novedades en Algarrobico
Las declaraciones que algunos han lanzado en torno al oportunismo político de las administraciones nacional y regional sobre el hotel Algarrobico, sobra. Si se tira un poco de hemeroteca se podrá leer cómo ya en tiempos de la consejera Fuensanta Coves y la ministra Elena Espinosa se hablaba de demoler el inmueble y reponer el entorno, con lo que no hay novedad en este tema por mucho que se nos haya querido vender a los medios no sé que noticias. No hay noticia, entonces y ahora se supeditó toda actuación a una resolución judicial definitiva, es decir, cuando ya no quepa más recursos. Y eso tiene mucho de lógica, o sino que se lo pregunten a los ingleses a los que tiraron su vivienda, muy cerca precisamente de Carboneras.
Si hay algún oportunismo, alguna novedad en este caso es que Greenpeace de repente y no se sabe muy bien atendiendo a qué criterio, -pues no se había emitido una nueva sentencia, ni la empresa empezó a trabajar en el inmueble al que no puede acceder ni para dar seguridad....-., ha dado una nota de color en los informativos nacionales con el montaje de una oficina y las dos noches de hotel que se han chupado los activistas. Y como consecuencia de ello, ahora tenemos una bonita pintada y 20000 firmas en La Moncloa solicitando la demolición.
Pero a nivel político nada ha cambiado. Junta y Gobierno central, antes y ahora gobernados por el PSOE, siguen manteniendo su disposición a tirar el inmueble y el gobierno local, antes en manos del PSOE ahora de GICAR-PP, defienden su terminación y apertura, por lo que resulta muy lógico, aunque le pese a los grupos ecologistas, que esta administración municipal no retire ninguno de los pleitos abiertos. Claro que todo esto puede cambiar en breve y tal vez ahí resida el oportunismo ecologista. Y es que según las encuestas el PP ganas las generales y lo tiene más fácil que nunca para hacerse con las autonómicas en Andalucía. Si eso sucediera, entonces sí es posible que el discurso de Gobierno central y Junta cambiara porque en este tema, todo hay que decirlo, el PP no ha hablado muy claro aún.
Si hay algún oportunismo, alguna novedad en este caso es que Greenpeace de repente y no se sabe muy bien atendiendo a qué criterio, -pues no se había emitido una nueva sentencia, ni la empresa empezó a trabajar en el inmueble al que no puede acceder ni para dar seguridad....-., ha dado una nota de color en los informativos nacionales con el montaje de una oficina y las dos noches de hotel que se han chupado los activistas. Y como consecuencia de ello, ahora tenemos una bonita pintada y 20000 firmas en La Moncloa solicitando la demolición.
Pero a nivel político nada ha cambiado. Junta y Gobierno central, antes y ahora gobernados por el PSOE, siguen manteniendo su disposición a tirar el inmueble y el gobierno local, antes en manos del PSOE ahora de GICAR-PP, defienden su terminación y apertura, por lo que resulta muy lógico, aunque le pese a los grupos ecologistas, que esta administración municipal no retire ninguno de los pleitos abiertos. Claro que todo esto puede cambiar en breve y tal vez ahí resida el oportunismo ecologista. Y es que según las encuestas el PP ganas las generales y lo tiene más fácil que nunca para hacerse con las autonómicas en Andalucía. Si eso sucediera, entonces sí es posible que el discurso de Gobierno central y Junta cambiara porque en este tema, todo hay que decirlo, el PP no ha hablado muy claro aún.
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